imaginé al sol como el re-cuerdo, el que lleva el control del tiempo (la cuerda) que marca el ritmo de la danza del vivir. Ese como recuerdo de la tierra y el mar en primavera, los tres puestos de sombrero en la cabeza del hombre. Es una bella imagen, honesta, excelsamente humilde.
Me recordó al Sueño de un mediodía de verano de Yannis Ritsos. Hay te va un cacho del poema: ¡Qué alto conversan los pájaros cuando duermen! Se parecen a los niños que toda la noche repiten en sueños la tonadilla que recitarán en sus exámenes. Nosotros no dormimos, escuchamos nuestras canciones que zumban como enjambres alrededor de las florecitas de manzanilla de los astros y alrededor de nuestro corazón. Los adultos nos llaman flojos. Pero nosotros conocemos el trabajo y permanecemos despiertos hasta el amanecer, laborando en el gran campo azulado para que no falte nunca el jardín del sol por encima de los jardines de los hombres. Nosotros, aunque nos llamen perezosos, conocemos el trabajo arduo, sabemos qué significa arar, desde el principio, el más grande de los campos que día a día cubren las ortigas. Nosotros sabemos cuánto se cansaron las doradas manitas de los rayos de luz para construir estas alegres ciudades de flores con abiertos balcones de rosas y altos campanarios de lirios. Los demás únicamente ven los rayos y las flores. No saben nada acerca de nuestra fatiga y de nuestras lágrimas.
--Salmón, me salió de chiripa... --George, ¡atrévete! --Eleonaí, los sombreros de palma me encantan... --Kix, ya vendrán días soleados... --Mafalda, ;) --Gatita, orita checo a ver si me saqué la lotería y se nos hace lo de la palapota... --Dull, el mar y la literatura son mi máximo... --Chokkolatt, fue una Semana Santa en el Mediterráneo: recuerdo... --Giovanni Ríos, se supone que son siete, cinco, siete... --Diego Fabián, pues como salga, lo muestras... --Nando Zambrano, qué lindo cacho de poema... re-cuerdo, y vuevo a re-cordar... el mar, el sol... mi sombrero. La Primavera...
Gracias por sus comentarios, vuelvan pronto, aquí l@s espero...
16 comentarios:
ah q bonito haiku!!!
hoy andamos inspirados?
Pucha... un haiku, no puedo escribir uno ue valga la pena, pero me atrevo.
Sonatas y rimas
tocaban las bandas,
y nosotros, bailamos de madrugada.
buuuuuuuuuuu !!! no avienten tomates!!!!!!
Hola:
Me inundé de Sol por la mañana. Al regresar fue cambiando a nublado, luego niebla, ahora la llovizna chipi-chipi.
Usualmennte traigo un sombrero de palma en el auto, pocas veces lo uso.
En cambio acá el día está espantoso...
....
Hola hola mi Juanis, al rato te das una vuelta a mi choza, tenes una invitación....
Mafalda
Lindo tu sombrero!!!!..... mucho mejor tu mar!!!... y más la Palapota.
Besito amiguita y un abrazote de gatita. MUUUUUA!!!
Ohh! ultimamente el mar nos tiene cautivados a varios eh!
Buen inicio de semana amiga
Ese sol me gusta, por eso no uso sombrero.
Saludos!
Pero me gustó que te quedes con los recuerdos.
No tengo palabras
chanfles! yo los hago alrevés!!!
Sorry mi Angeek... No soy muy bueno para los haikus...
Estoy un poco de apuro... Mas tarde intento hacer uno...
Saludos a la distancia...
imaginé al sol como el re-cuerdo, el que lleva el control del tiempo (la cuerda) que marca el ritmo de la danza del vivir. Ese como recuerdo de la tierra y el mar en primavera, los tres puestos de sombrero en la cabeza del hombre. Es una bella imagen, honesta, excelsamente humilde.
Me recordó al Sueño de un mediodía de verano de Yannis Ritsos. Hay te va un cacho del poema:
¡Qué alto conversan los pájaros cuando duermen!
Se parecen a los niños que toda la noche repiten en sueños la tonadilla que recitarán en sus exámenes.
Nosotros no dormimos, escuchamos nuestras canciones que zumban como enjambres alrededor de las florecitas de manzanilla de los astros y alrededor de nuestro corazón.
Los adultos nos llaman flojos.
Pero nosotros conocemos el trabajo y permanecemos despiertos hasta el amanecer, laborando en el gran campo azulado para que no falte nunca el jardín del sol por encima de los jardines de los hombres.
Nosotros, aunque nos llamen perezosos, conocemos el trabajo arduo, sabemos qué significa arar, desde el principio, el más grande de los campos que día a día cubren las ortigas.
Nosotros sabemos cuánto se cansaron las doradas manitas de los rayos de luz para construir estas alegres ciudades de flores con abiertos balcones de rosas y altos campanarios de lirios.
Los demás únicamente ven los rayos y las flores.
No saben nada acerca de nuestra fatiga y de nuestras lágrimas.
--Salmón, me salió de chiripa...
--George, ¡atrévete!
--Eleonaí, los sombreros de palma me encantan...
--Kix, ya vendrán días soleados...
--Mafalda, ;)
--Gatita, orita checo a ver si me saqué la lotería y se nos hace lo de la palapota...
--Dull, el mar y la literatura son mi máximo...
--Chokkolatt, fue una Semana Santa en el Mediterráneo: recuerdo...
--Giovanni Ríos, se supone que son siete, cinco, siete...
--Diego Fabián, pues como salga, lo muestras...
--Nando Zambrano, qué lindo cacho de poema... re-cuerdo, y vuevo a re-cordar... el mar, el sol... mi sombrero. La Primavera...
Gracias por sus comentarios, vuelvan pronto, aquí l@s espero...
se supone...
... que es de 5, 7, 5
Saludos
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