¿Escribiendo en el blog me dedicaré más a mí?
Según Mario Bellatín, escritor mexicano:
Escribir es mostrar una huella digital del alma.
Otro mexicano, el poeta Alí Chumacero, dice:
Otro mexicano, el poeta Alí Chumacero, dice:
Si los versos no sirven para enamorar, no sirven para nada.
Tú... ¿qué opinas?
Tú... ¿qué opinas?
Imagen tomada de Mis imágenes de Google.
12 comentarios:
¡Bienvenida de nuevo!
Sobre los versos, no sé qué opinar.
Pero suscribo totalmente las palabras de Mario Bellatín.
Entiendo que escribir es dedicarse a uno mismo al tiempo que se dedica a los demás. Porque has escrito, estás viva; y porque has escrito, algunos estamos aquí, leyendo.
Un abrazo, Coro.
Querida Coro
Vaya que te has tardado ne regresar, pero como dice Fernando, lo bueno es que estás de vuelta, viva para seguir escribiendo.
Dice Alejadra Pizarnik:
"Escribo contra el miedo. Contra el viento con garras que se aloja en mi respiración."
Pero por la razón que sea, lo importante es, ccuando menos -en mi caso- intentarlo.
Un beso
Fernando: Creo que he recuperado esas ganas de "decir"... y eso es volver!!!
Gracias por tu visita y comentario, un abrazo.
Marichuy,
pues eso quiero, eso pretendo: escribir respirando sin dificultades (literal y metafóricamente).
Besos
Me alegro d q hayas vuelto... y si... a veces no tengo mucho tiempo, pero realmente esto es dedicarme un rato a mi... a expresar lo q siento. ¿Cierto?
Lindo leerte! y cualquiera que sea tu convicción y tu sentido para escribir, será siempre bienvenido por lo fresco y prolijo. Por lo apasionado y gustoso que es leerte :D Bienvenida!
Nayuribe:
El tiempo que nos demos a nosotras es muy importante... expresar lo que sentimos...
Gracias por venir a esta mi nueva etapa.
Besos
Dr. Gurma:
Son un deleite tus palabras... amigables, frescas, cálidas... gracias.
Un abrazo
¿Anduviste de parranda?
Eleonaí:
¡Un parrandóooooooooooooon!
Saludos
"No he aprendido a sufrir, toda severidad es inhumana"
Juan Carlos Mestre
Luz de un quinquet
9 pintas, 29 latidos, Gillespie,
madrugada, ganas de hablar.
La generación del 77 íbamos a cambiar el mundo en el fututo
pero los electrodomésticos siguen funcionando en el 2007,
como siempre…
Me pregunto:
Por qué un intermitente puede llevarme a la lágrima, de vasta emoción, por qué siento que me responde, cuando se ilumina su automática luz naranja, y que no estoy solo, que somos dos, objetos comunicándose, que la máquina pretende mi atención, sabiendo antes de que se ilumine sin embargo apenas un segundo antes que así será…
No lo entiendo:
Por qué ladra el borracho a los coches que pasan a su lado.
Es de noche.
Hace frío.
Mientras, la gente ahí afuera insiste, empujando sus pesadas rocas, hacia la pirámide.
En las paredes de mi casa se pudre la luz de ayer por la mañana.
Y yo sigo de pie junto a la ventana, sin tomar ninguna decisión.
Podría quedarme a vivir dentro de esta canción.
A night in Tunisia.
Pienso que:
La oportunidad debe ir acompañada de destreza…
Todos los muebles de casa me observan con rostro de preocupación.
No quiero pensar,
para no atraer su atención, con el ruido de mi cabeza.
Un automóvil ha atropellado al borracho, se apagó el ruido y la furia.
Está muerto, pero no siento lástima.
Tampoco sé qué significa eso realmente, si es salvaje, inhumano o inmoral,
pero es cierto.
Y mientras, la gente ahí afuera no deja de insistir, empujando sus rocas.
Me pregunto:
Debe haber algún motivo por el que todo haya adquirido esta forma,
esta forma de costumbre, en que amanece como una herida sin importancia.
Ya no recuerdo qué clase de paciencia me trajo a este lugar...
Cuando escribo, comienzo a zurcir los desgarrones del alma.Y aunque la vida se empecina en razgarlos otra vez, la vida misma me anima a perseverar en la terapia de la palabra compartida. Será que así confirmo que sigo viva?
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