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viernes, diciembre 05, 2008

Entre dos

Estaba en época de exámenes y no tenía claros algunos temas. Había contradicciones en lo que estudiaba. Por un lado, la materia de Ciencias y por otro, la clase de Religión. Mi abuelo estaba en casa y aproveché para preguntarle:
-¿De dónde venimos los seres humanos?
Él, rápidamente me mostró el árbol genealógico que había estado haciendo esos días de heladas tremendas cuando no salió de casa.
Dibujadas en el arbolito estaban las caras de los antepasados de sus antepasados más remotos… y por consiguiente de los míos.

-Todo ser humano comienza siendo un bebé que sobrevive sólo si recibe cuidados –me dijo.
-Eso es lógico, abuelito. Pero hoy en el colegio las monjas nos enseñaron que un señor Darwin dijo que descendemos del mono.
-¿Te hablaron las religiosas del origen y evolución de las especies? –preguntó asombrado el viejo.
-Más o menos, yo quería que nos explicaran más de los animales, pero no lo hicieron. Después de ese tema nos santiguamos y besamos la Biblia. Y luego nos contaron la historia de nuestros primeros padres, Adán y Eva, que vivían en el Paraíso, pero como pecaron, le hicieron caso a una serpiente que les habló y los invitó a comerse una manzana, cosa que tenían prohibida, vino un ángel y los echó de ahí. Y también nos dijeron que Dios creó el Universo y el Mundo y descansó el séptimo día… Pero eso no dice el libro de Ciencias.

El abuelo me miraba sin decir nada. Yo continué:
-Te soy sincera, es una historia muy linda la que nos contaron, de serpientes parlanchinas, ángeles, paraísos, pero me pareció más bien un cuento… ¿Acaso tenemos primos orangutanes?
-No solamente primos primates –me dijo y agregó-: en el mar, algunas criaturas acuáticas, semejantes a los tiburones, engendraron los primeros seres humanos que luego fueron evolucionando hasta…
-¡Abuelito! Entonces tenemos un principio, no somos infinitos…
Pero ellos, esas criaturas marinas, ¿de dónde salieron? ¿Hay un Dios, como explican mis profesoras monjas?

Mi pobre abuelo lo tenía difícil con el tema, sin embargo siempre encontraba una salida a mis cuestionamientos:
-Te lo explicaré con números. Asignemos al día presente: "Cero". Mañana será +1; pasado mañana, +2; y así sucesivamente al futuro. Y para irnos al pasado tenemos que ayer fue -1; anteayer, -2; el día después de anteayer, -3; y nos vamos hacia atrás con números negativos.
-Abuelo, nunca terminaríamos de contar con números negativos al pasado, y eso me da la sensación de que surgimos de la nada… y con números positivos tampoco acabaríamos hacia el futuro nunca.
-¡Exacto! Existe la teoría de que nuestro mundo finito se halla encajonado entre dos infinitos. Las religiones lo explican con un Ser que llaman Dios…
Esta vez fui yo la que lo miré sin hablar.

-Mejor escucha este poema de Mario Benedetti, se llama: Mundo –me dijo el viejo y se puso a declamar.
No vayas a creer lo que te cuentan del mundo / en realidad el mundo es incontable / en todo caso es provincia de ti / no vayas a creer lo que te cuentan del mundo / aun los que te aman mienten sobre / probablemente sin saber que mienten / en la vigilia te sentirás lejano / testigo de tu mundo desde el mundo / sin nubes de tu aliento en los cristales / la humareda del hombre se eleva en la noche / y no sabrás de donde viene el fuego / pero la expectativa te volverá humilde / en el mundo el abismo es un oficio / las preguntas en vano / una vieja costumbre / los desatinos / marca de abolengo / no vayas a creer lo que te cuentan del mundo / (ni siquiera esto que te estoy contando) / ya te dije que el mundo es incontable.

Dejé los libros y me puse a declamar poesías con el abuelo hasta que llegó la hora de la cena. Después vino la música y me fui a dormir tarde esa noche.
Y sin haber estudiado... casi.

19 comentarios:

Caracola Light dijo...

Cómo me gusta este abuelo. Genial!

Maritoñi dijo...

Interesante, muy mucho. Menudo abuelo. Saludos!

marichuy dijo...

Coro

Adoro a tu abuelo... y también al gran Benedetti.

Que afortunada por tener un abuelo como el tuyo, mi estimada Coro.

Besos

Nayuribe dijo...

¿Sin haber estudiado?
Aprendiste más de lo que yo aprendí en religión y ciencias en el colegio... las lecciones de vida con tu abuelo y bennedetti... esas si te ponen a pensar.
besos

Coro dijo...

Soportándome,
sí que era genial... a mí también me gustaba mucho.

Maritoñi,
muy interesante... muy muy mucho.

Marichuy,
los dos adorables...

Nayuribe,
con el abuelo aprendí más que en la escuela, sin duda...

Besos y abrazos infinitos para tod@s ustedes...

Gracias por venir y por dejar sus comentarios.

Arturo Herrera dijo...

El mundo es incontable pero también incompleto y entre ambos está la prosa o la poesía; eso sí, depende del gusto.

Un abrazo

Alb@ dijo...

Sigo disfrutando al abuelo...que interesantes reflexiones.

Te dejo un abrazo.

Ramón María dijo...

Más, mas quiero más..


Un saludo.

*ஐღ Mì†a ღஐ* dijo...

Los abuelos...siempre llenos de sorpresas y de amor

Lindo

Arrivederci

Anónimo dijo...

¡Qué abuelo!

Y su gusto por Benedetti.

Felíz semana Coro.

Coro dijo...

Arturo Herrera:
Incontable, incompleto, finito e infinito, poesía, matemáticas y ¡prosa! qué agasajo...

Alba, paisana:
Pues seguiremos disfrutando (yo también al recordar)...

Montxu:
Están cocinándose más, ya vendrán, yo también lo quiero...

Mita:
Sí, son lindos y con mucho amor...

Eleonaí:
Le gustaba mucho Benedetti, entre otros...

Muchas gracias por sus comentarios (le hubieran encantado al abuelo).
Tengan tod@s ustedes una feliz semana.

Abrazos y besos.

Juan de Lobos dijo...

Aullo y disfruto de ese abuelo maravilloso violín en mano y te veo a ti Maestra con coletitas y tobilleras, ambas son lindas imágenes.
Aullidos y besos para ti.

DAC dijo...

Coro, sigue contándonos historias con tu abuelo, aprendemos y nos hace pensar.

Ciencia y religión, ¿condenadas a entenderse?¿poseen un punto de partida común?¿se puede ser científico y religioso a la vez?

Caracola Light dijo...

Se me olvidó decirte que ante la angustia existencial, nada mejor que sublimarla con literatura.

jesus dijo...

nuestro tiempo es tan breve que imaginar un tiempo remotamente infinito es casi una tortura mas que un desafio, una mala broma jeje
¿de donde venimos, y adonde vamos? infita también la respuesta o desconocida, perdido el presente en medio de un océano infinito de tiempo.
saludos

Coro dijo...

Lobo:
Gracias, me has hecho reír "con coletitas"... Besos, y además maullidos de mis gatitos para ti.

DAC:
Estas historias del abuelo parecen infinitas, apenas termino una y me acuerdo de otra. Y ya sabes, imposible con el eterno tema de Ciencia vs Religión...

Soportándome:
Así es, no nos queda de otra... sublimar la angustia con letras.

Jesús:
Nuestro tiempo es un cero entre dos inmensidades a donde quisiera suponer que iremos...

jesus dijo...

puede no vayamos a ningún lado, o vayamos a todos a la vez. En cualquier caso quiero pensar que hacia alguna parte nos lleva el camino, aunque de la vereda no salgamos
saludos

Fernando García Pañeda dijo...

Es que esto del origen de las especies tiene muchos puntos de vista.
El del encajonamiento, quizá el mejor.
Un abrazo.

Coro dijo...

Jesús:
La único que sé es que estamos aquí y ahora...
Un abrazo

Fernando:
Y sí, tantos como especies hay...
Abrazos

Muchas gracias por sus comentarios.