
La Micha maúlla suavecito y Katum y Lenin ¡Zaz! ¡Zaz!, acuden deprisa a su lado.
-¿Miau? –le preguntan.
-¿Miau? –le preguntan.
Pide comida para el clan y deja que sus retoños (ya más altos que ella) se satisfagan primero. Sin embargo, la Micha es la jefa.
También es una gordita tranquila, o más bien parece un tanque comparándola con los flacos y musculosos de sus hijos…
Pareciera que lo tiene todo controlado. Duerme casi todo el día: despaturrada, tranquila y a sus anchas.
Suele echarse a mis pies, y de cuando en cuando me mira fijo...